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Ahora que las clases acaban de empezar y se inicia un nuevo curso, tenemos que ser conscientes que una de las claves para el aprendizaje es la capacidad de atención y concentración. La gran cantidad de estímulos actuales, el acceso a internet y a centenares de informaciones, entre otros, puede complicar mucho la concentración y generar estrés. Ayudarlos y enseñarlos a mantener la atención y la concentración en casa, será de gran ayuda.
- Tenemos que fomentar que no se distraigan a través de un espacio neto y ordenado. Lo podemos conseguir si su habitación de estudio hay pocas distracciones. Evitaremos videojuegos, móviles, porque se concentren hacia aquello importante.
- Tenemos que diseñar unos horarios y hábitos. Cada tarea tiene que tener un tiempo concreto y el niño tiene que saber que determinadas horas sirven para hacer determinadas cosas. Este hábito creará rutinas mentales de atención y de concentración.
- No haremos periodos de tiempos excesivamente largos en las tareas que hayamos de tener concentración. La atención empieza a decaer alrededor de los 50 minutos o menos, según cada edad. Una vez acabado el tiempo se tiene que descansar para volver a reiniciar la atención.
- Para estar concentrados es muy importante dormir bien y estar muy descansados. Las tareas más difíciles o que requieren una mayor atención se tienen que hacer cuando estén descansados.
- Calmar la mente, a través de hacer ejercieras de respiración, yoga u otros porque se tranquilice y disminuir los niveles de estrés y mejorar la concentración.