A veces los niños y las niñas pierden el interés para bañarse a directamente no quieren pasar por la bañera o la ducha. Si esto pasa primeramente tenemos que mantener la paciencia y la calma.
El miedo por el agua puede venir motivado por la cantidad de agua de la bañera, por el que la podemos llenar menos, hacer una ducha o que entre en una bañera vacía y se lo llene a su gusto, siempre controlando la cantidad. Además podemos:
- Que el momento sea divertido: Tendremos que cambiar la estrategia y que aquel momento despierte interés. Lo podemos hacer con nuevos juguetes especiales de bañera como uno pesca pescados, unas burbujas... unos juguetes que sólo aparecerán a la hora del baño para hacerlo más atractivo.
- Aporta serenidad: La hora de la bañera puede ser un momento calmado y relajado con música relajante, una encendiendo una vela aromática, poner algunos pétalos de flores, leer un cuento, poner alguna pastilla de burbujas al agua.
- Compartir la bañera o la ducha: Entra en la bañera o en la ducha con el pequeño o pequeña, será una manera de mostrar que la hora del baño es seguro y divertido.