Rincón de lectura sencillo

La lectura es un hábito que nuestros hijos pueden adquirir desde muy pequeños. Si los animamos a pasar ratos entre libros y cuentos, y conseguimos que disfruten, la lectura formará parte de su día a día por siempre jamás. Y el día de mañana los ayudará mucho en su aprendizaje.

Es por eso que recomiendo tener un rincón para leer preparado para ellos. Si buscáis ideas por internet, podéis encontrar rincones ideales.

Pero si tenéis una casa pequeña (como nos pasa a nosotros) podéis optar por algo sencilla y que no ocupe mucho espacio. Nosotros hemos preparado su rincón de lectura a la sala de estar, para poder estar todos juntos, puesto que al final es donde los gusta más pasar el rato.

Este es nuestro rincón de lectura en 3 pasos:

1. Hemos usado una esquina junto a la ventana porque tenga buena iluminación. Hay una luz justa encima así que por las tardes también se ve bien.  Por el hecho de estar al salón y cerca del sofá, puedo sentarme a leer yo también,  así compartimos este momento y se sienten muy grandes.

2. Le he puesto dos almohadas gruesas para poder sentar convirtiéndose en una pequeña butaca. Ellos están encantados y la mejor parte es que si hace falta lo recogemos en un momento y no ocupan espacio extra. En cualquier tienda que tengan muebles de jardín podéis encontrar unas almohadas cómodas que no te importe que estén en tierra.

3. Creo que el más importante del rincón de lectura es que lo tengan todo a su alcance para poder ponerse a leer cuando los apetezca sin tener que estar nosotros pendientes. Por eso también los libros tienen que estar a su altura y que sea fácil cogerlos y volverlos a guardar. Nosotros hemos aprovechado unas estanterías por DVDs de la Ikea que ya teníamos y hemos vaciado la parte de bajo para sus cuentos.

Ya veis que no hay que complicarse mucho: que tengan luz, un asiento cómodo y los libros a su alcance. Y con esto ya tienes tu rincón de lectura infantil.

Te animas a fomentar la lectura en casa tuya?