El edema es la inflamación de alguna parte del cuerpo por una acumulación de líquido en los tejidos. El edema normalmente es blando y cede cuando se hace presión sobre él.
Si un edema se produce durante el embarazo, es causado por la retención de líquidos y el aumento del volumen sanguíneo. Esto se debe de a la presión que el útero hace sobre los vasos sanguíneos que dificulta el regreso de la sangre al coro. El edema también puede provocar otras alteraciones, cómo hipertensión arterial, problemas cardíacos o renales. Aún así, los edemas a las piernas pueden ser normales, pero no cuando se extienden a las muñecas, la cara y el cuello, por lo cual tenemos que visitar al médico lo antes posible, puesto que podría implicar una complicación importante.
Cuando se sufre un edema podemos notar una molesta sensación de hormigueo en los dedos, especialmente por la noche y desaparece después del reposo nocturno.
En el supuesto de que la inflamación afecte los tobillos, es aconsejable dormir y descansar con las piernas elevadas, andar una hora diaria como mínimo y hacer ejercicios con los pies. Las medias de compresión también ayudan. Si aparece en otras partes del cuerpo, se tiene que consultar con el ginecólogo, que valorará la posibilidad de suministrar algún tratamiento.