Hay que hacer deberes después de la escuela?

El modelo educativo español se basa en jornadas de 6-7 horas lectivas a las cuales se le tienen que sumar 2 o 3 más, para hacer los deberes a casa. La Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnas (Ceapa), hizo una estimación y señala que con este tipo de organización, los niños y niñas pueden acabar haciendo jornadas de 60 horas semanales, cosa que ningún adulto admitiría.

Recientemente se ha abierto un debate alrededor de este tema, muchos padres y madres quieren que sus hijos no tengan que hacer deberes fuera del horario escolar o, cuando menos, que sean actividades voluntarias.

Prueba que esta cuestión preocupa y está a la orden del día, es la creación de proyectos como Sindeberes, un blog donde se exponen, entre otras cosas, maneras alternativas de educar a los niños. O vídeos como el que rueda por las redes sacudiendo la conciencia de los padres hacia la cantidad de horas de dedicación que se pide desde las escuelas a nuestros hijos:

Cada parte implicada en este debate tiene sus razones para defender su posición.

Defensores de los deberes:

• Ayudan a consolidar los conocimientos que se han aprendido en la escuela
• Crean hábitos de estudio y de trabajo que pueden ayudar al niño en un futuro
• Promueven la autonomía y la implicación de los niños en el aprendizaje
• Son adecuados por los aprendizajes que se basan en la repetición y la práctica (la lectura, el cálculo o la gramática)
• Sirven para conectar el contexto escolar con la vida cotidiana

Defensores de no hacer deberes:

• Puede generar desigualdades entre el alumnado si los padres pueden permitirse pagar academias de refuerzo o no
• Cada niño tiene su ritmo de aprendizaje
• Los deberes no se suelen coordinar con el equipo docente y no se personalizan en función de cada alumno
• Generan una alta acumulación de tareas, sin considerar el tiempo que puede tener disponible el niño fuera del horario lectivo
• Generan problemas de ansiedad, estrés y déficit de atención

En Sant Cugat hay un total de 14 escuelas (de educación infantil y primaria y de educación secundaria) que están representadas por la coordinadora de AMPA's. Estos centros se basan en el modelo educativo tradicional y, por lo tanto, ponen deberes a sus alumnos.

Pero en la ciudad también se pueden encontrar otros modelos educativos basados en el "learning by doing" (aprender haciendo) que es típico de países como Finlandia. El colegio CreaNova es uno de los centros que ofrece a sus alumnos una educación basada en "la libre experimentación, el trabajo por proyectos y el fomento de las Inteligencias Múltiples".

A la polémica de los deberes también se le suma la del calendario escolar, que según muchos padres no se adapta a la realidad social actual. La Mar, cofundadora del blog Sonambulistas, expone el hecho que los niños tienen 3 meses y medio de vacaciones, más 2 meses en los cuales tienen jornada reducida. Esto, ante los 22 días que por ley los padres tienen de vacaciones que dependen del puesto de trabajo, puede llegar a ser un mes. La Mar se plantea como hacerlo para atender correctamente a los hijos que se tienen que quedar sólo en casa mientras ellos trabajan. La respuesta, cuando menos, parece evidente y es la necesaria revisión del calendario.